Vivimos en una época en la que es cada vez más común conocer a niños (o adultos) con TDAH. Desafortunadamente, es una condición sobre la que se han desarrollado varios mitos que pueden confundir a quien la padece, a sus familiares y a la gente con la que convive. En esta ocasión te hablaremos sobre estos mitos y los fundamentos científicos que lo refutan.

 

Mito 1:

EL TDAH no existe, es un invento reciente para justificar la mala educación de los niños.

 

Realidad:

El médico escocés Alexander Cricton describió por primera vez el TDAH en el año 1798.1 Actualmente se sabe más sobre el TDAH gracias a estudios de neuroimagen y otras investigaciones; en cada estudio se confirma que es un trastorno médico que involucra situaciones genéticas, funciones anatómicas y neurotransmisores,2,3 es decir, no es una condición que sea provocada por “la voluntad del niño”, en otras palabras, el niño no elige portarse mal.

 

Por ello, es fundamental comprender que se trata de una condición médica legítima que requiere diagnóstico y tratamiento adecuados.

 

Mito 2: 

Los síntomas de TDAH son leves, no es una enfermedad, es que los padres en la actualidad aguantan poco.
Realidad:

Los niños con TDAH tienen un funcionamiento físico, social, mental y emocional desregulado y, por lo tanto, muestran una marcada disminución en su calidad de vida.4

De no tratarse, el TDAH a largo plazo, reduce seriamente el rendimiento académico del niño y esta situación puede llevarlo a problemas escolares (repetir cursos, no dominar alguna materia escolar), ausentismo académico, así como más visitas al médico, afectando el desarrollo social y emocional del niño.5,6

 

Las dificultades sociales y emocionales son particularmente comunes y problemáticas en los niños con TDAH. Las dificultades sociales se presentan en una variedad de formas y pueden conducir a conflictos con la familia y problemas con sus compañeros (tener pocos amigos, relaciones sociales menos estrechas, rechazo por sus compañeros). Los problemas “leves” generalmente no llegan a recibir atención, pero los más graves (poca autorregulación emocional, agresión y empatía reducida) pueden desencadenar otras enfermedades como ansiedad, depresión y trastornos de la conducta.6,7

 

Los niños con TDAH que no son tratados pueden desarrollar abuso/dependencia a la nicotina, el alcohol, la marihuana y la cocaína, entre otros. Además, pueden desarrollar conductas desafiantes contra los padres (o la figura de autoridad), desobediencia y delincuencia.7

 

Como has visto, el TDAH no es cuestión de “educación”, es una condición médica que requiere un tratamiento adecuado y oportuno.
Mito 3: 

El TDAH es una enfermedad exclusiva de la infancia.

 

Realidad:

Esta cuestión puede responderse con un sí y un no. Sí porque se inicia y diagnostica en la infancia, y no porque muchos síntomas persisten en la adolescencia y en la adultez. Seis de cada 10 niños con TDAH continuarán mostrando síntomas durante su etapa adulta y muy a menudo, el diagnóstico no se realiza sino hasta que la persona llega a la etapa adulta.8

 

Mito 4: 

Solo los niños (varones) tienen TDAH.

 

Realidad:

Tradicionalmente se asocia el TDAH con los niños porque lo presentan con mayor frecuencia (4 niños por 1 niña). La razón por la que en muchas ocasiones se pasa por alto o se subestima el TDAH en las niñas es porque ellas presentan más falta de atención, ansiedad o depresión y alteraciones en el aprendizaje (parece que siempre “andan en las nubes”), a diferencia de los niños, en quienes se presenta más la hiperactividad e impulsividad (son más inquietos y desobedientes), motivo por el cual son llevados a consulta.9-12

 

Mito 5:

El tratamiento para la TDAH causa adicción.

 

Realidad:

Existen muchos mitos alrededor de los medicamentos para el TDAH. Uno de los principales es que producen adicción, porque son “drogas”. Esto es falso porque, a dosis normales y por vía oral, estos medicamentos no producen un efecto euforizante ni de dependencia. De hecho, se ha demostrado que en los niños incluso reduce el riesgo de que en un futuro abusen de drogas, porque disminuye la impulsividad asociada a este diagnóstico.13

 

Mito 6: 

El TDAH se controla solo con medicamentos, puede o no asistir con el psicólogo.

 

Realidad:

Se recomienda que los padres trabajen estrechamente con las otras personas que sean parte de la vida del niño como los maestros, entrenadores deportivos y otros miembros de la familia.14

 

La psicoterapia es un pilar del tratamiento que puede ayudar a reducir los comportamientos inadecuados y a mejorar la capacidad de autocontrol. Con frecuencia, puede ser útil comenzar con la psicoterapia tan pronto como se haga el diagnóstico.14

 

Las metas de la psicoterapia son aprender comportamientos positivos y fortalecerlos, y eliminar los comportamientos no deseados o problemáticos14, por ello, no es una terapia opcional, es una terapia que apoya el tratamiento médico.

 

¡Tu participación como papá/mamá/cuidador es muy importante! Una vez que ya se realizó el diagnóstico, el médico y su equipo diseñaran un plan de tratamiento que puede incluir la participación de un psicólogo clínico o pedagogo.

Tanto el médico, como los padres de familia e incluso los maestros del colegio, deberán fijar en conjunto los resultados a los que se quiere llegar con el tratamiento, para lo que se requiere un seguimiento cercano del niño.15

 

Material creado con fines informativos dirigido a público general y pacientes, revisado por el Departamento Médico de Abbott. Este contenido no pretende ser sustituto del consejo, diagnóstico o tratamiento del profesional de la salud. Si experimenta cualquiera de los síntomas mencionados, comuníquese con su médico.

 

Referencias: 

 

  1. García F. Prehistoria del TDAH: Aditivos para un diagnóstico insostenible. Papeles del Psicólogo. 2017;38(2):107-115.
  2. Pereira V, Castellanos F. Neuroimaging in attention-deficit/hyperactivity disorder. Curr Opin Psychiatry. 2021;34:105-111.
  3. ADHD and the Brain. Am Acad Child Adoles Psychiatr. 2017. [Consultado el 30.07.24] Disponible en: https://www.aacap.org/AACAP/Families_and_Youth/Facts_for_Families/FFF-Guide/ADHD_and_the_Brain.aspx
  4. Lee L, Arunajadai S, Mikl J, et al. The burden of attention-deficit/hyperactivity disorder in adults: a real-world linked data study. Prim Care Companion CNS Disord.2023;25(2):22m03348.
  5. Arnold L, Hodgkins P, Kahle J, et al. Long-Term Outcomes of ADHD: Academic Achievement and Performance. J Atten Dis. 2020;24(1):73-85.
  6. Classi P, Milton D, Ward S, et al. Social and emotional difficulties in children with ADHD and the impact on school attendance and healthcare utilization. Child Adolesc Psychiat Ment Health. 2012;6(1):33.
  7. Molina B, Pelham W. Attention-Deficit/Hyperactivity Disorder and Risk of Substance Use Disorder: Developmental Considerations, Potential Pathways, and Opportunities for Research. Annu Rev Clin Psychol. 2014;10:607-639.
  8. Targum S, Adler L. Our Current Understanding od Adult ADHD. Innov Clin Neurosci. 2014;11(11-12):30-35.
  9. Rusca F, Cortez C. Trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH) en niños y adolescentes. Una revisión clínica. Rev Neuropsiquiatr. 2020;83(3):148-156.
  10. Oroian B, Nechita P, Marusic R, et al. Gender dynamics in ADHD: understanding ADHD in females from childhood to adulthood. Bull Integrat Psychiatr. 2023;99(4):77-88.
  11. Neves S. Trastorno por déficit de atención e hiperactividad en el adulto (TDAH). Monográfico para médicos de Atención Primaria. SEMERGEN (Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria). [Consultado el 09.07.24] Disponible en: https://semergen.es/saludmental.es
  12. Holthe G, Langvik E. The Strives, Struggles, and Successes of Women Diagnosed With ADHD as Adults. SAGE Open. 2017;7(1): 1-12.
  13. Soutullo C. Mitos del tratamiento farmacológico en el TDAH. Fundación CADAH [Consultado el 19.06.24] Disponible en: https://www.fundacioncadah.org/web/articulo/mitos-del-tratamiento-farmacologico-en-el-tdah-.html
  14. CDC. Treatment of ADHD. U.S. Centers for Disease Control and Prevention. [Consultado el 01.08.24] Disponible en: https://www.cdc.gov/adhd/treatment/index.html
  15. Leslie L. The Role of Primary Care Physicians in Attention Deficit Hyperactivity Disorder (ADHD). Pediatr Ann. 2002;31(8):475–484.

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